Perdemos para ganar algo mejor o eso dicen...
yo aún no he encontrado nada mejor que tu sonrisa
Que conozco su voz en formato susurro, en formato gemido, en formato secreto, que me sé los lunares de su espalda y el sitio en el que lo tienes que tocar, justo debajo de sus costillas, para conseguir que se ría con un simple roce o un pequeño y dulce bocado.
Que no solo conozco su última pesadilla, también las mil anteriores, yo sí que no tengo cojones de decirle que no a nada, porque tengo más deudas con su espalda que las que nadie tendrá jamás con la luna...
teniéndote a ti no necesito mas.
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